Antecedentes: La psicología educativa ocupa el segundo lugar, después de la psicología clínica, en cuanto a perfiles de actividad profesional, sin embargo, en las últimas décadas el papel del psicólogo educativo se ha desdibujado. Método: Se revisó la literatura especializada y se actualizaron trabajos previos del autor sobre el tema. Resultados: El artículo enfatiza la relevancia de la psicología educativa en la prevención y la promoción de la salud mental infanto-juvenil. Para ello es necesario delimitar las funciones del psicólogo en contextos educativos, diferenciándolo de otros roles profesionales. Con esta finalidad: (1) se plantean las principales funciones del psicólogo educativo con el alumnado, sus familias y el profesorado; (2) se describe la formación de postgrado necesaria para desarrollar estas funciones; y (3) se evidencia el relevante papel que pueden tener los centros educativos en la promoción de la salud mental infanto-juvenil, utilizando, a modo de ejemplo, dos problemas: el bullying-cyberbullying y la depresión en la infancia y adolescencia. Conclusiones: Las escuelas deben incorporar psicólogos educativos para desarrollar actividades de evaluación, prevención e intervención, y deben ser contextos donde promover el bienestar emocional, prevenir problemas psicológicos y de salud mental. El trabajo aporta una propuesta de intervención desde la psicología educativa.